«Echeverría pensaba que la Monarquía siempre había estado divorciada del pueblo»

El investigador del Instituto de Historia del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), Leoncio López-Ocón Cabrera, dio a conocer este viernes, 28 de abril, en el Aula de San Quirce, la figura del geógrafo, profesor y político Leonardo Martín Echeverría (1894-1958), dentro del Curso de Historia de Segovia, dedicado a las huellas segovianas en el exilio de 1939.

Republicano desde su adolescencia (aseguraba que la Monarquía había estado siempre divorciada del pueblo), Martín Echevarría mantuvo un compromiso inequívoco con la educación. A Segovia llegó en 1920 para ocupar la cátedra de Geografía e Historia en el Instituto General y Técnico. En el centro segoviano, donde permaneció hasta 1927, coincidió con Antonio Machado, con quien trabó buena amistad.

López-Ocón ahondó después en el periplo republicano de Martín Echeverría, que ocupó cargos para el Gobierno, primero como gobernador civil de Logroño y después en los Ministerios de Marina y Agricultura. Al comienzo de la Guerra Civil, llegó a entrevistarse en la cárcel de Alicante con José Antonio Primo de Rivera para hablar de un posible plan de paz, enviado por José Giral, de quien era hombre de confianza. Subsecretario de Propaganda, durante el conflicto publicó la obra Nuestra patria (1938), un «magnífico manual geográfico» dirigido a los combatientes que defendían la causa republicana.

Leonardo Martín Echeverría enseñó Geografía en el Instituto General y Técnico de Segovia entre 1920 y 1927

Como geógrafo, Leonardo Martín Echevarría colaboró con la editorial Labor, con la que publicó su Geografía de España (1928) en tres volúmenes, con sucesivas reediciones y alabada dentro y fuera del país. Ya en el exilio mexicano, intervino en la puesta en marcha de Atlante, sello bajo el cual publicó España. El país y los habitantes (1940), de gran circulación entre los republicanos del exilio. Sin embargo, su obra de madurez fue el manual Geografía humana (1954), reeditado tras su muerte y actualizado hasta mediados de los setenta. Como obra póstuma dejó La ganadería mexicana, encargada por el Banco de México por la experiencia y los conocimientos técnicos que el profesor poseía sobre el mundo agropecuario. Según López-Ocón, Echeverría, fallecido en Veracruz en 1958, es ejemplo del potencial de inteligencia y conocimiento que España perdió con la guerra y el exilio.

Marisa Costa, sobrina nieta de Martín Echeverría, estaba entre el público e intervino, emocionada, para hablar de su tío

A la charla asistió Marisa Costa, sobrina nieta de Echeverría, que se enteró de la celebración del Curso de Historia de Segovia a través de internet. Se la invitó a intervenir, y lo hizo, emocionada, para contar alguna anécdota familiar, como la del parecido físico que Leonardo tenía con su hermano Abel, hasta el punto de llegar a intercambiarse en algún examen. Abel fue quien mantuvo el contacto con Leonardo, durante el exilio de este, aunque la comunicación languideció tras la muerte de Abel, hasta el punto de que, en casa, lo poco que se hablaba del tío Leonardo iba acompañado de instrucciones severas de discrecion absoluta.

(En la imagen, Leoncio López-Ocón, minutos antes de pronunciar la conferencia en el Aula de San Quirce)