El Aula de San Quirce ha acogido este 7 de septiembre parte de los actos conmemorativos del centenario de la publicación de Nuevas canciones, el poemario que Antonio Machado publicó cuando residía en Segovia.
La jornada, organizada por la Real Academia de Historia y Arte de San Quirce y patrocinada por la Concejalía de Turismo-Turismo de Segovia, comenzó con las palabras de bienvenida del director de San Quirce, Pablo Zamarrón, y de la concejala de Turismo del Ayuntamiento de Segovia, May Escobar. En el Aula se sucedieron cuatro interesantes ponencias en torno a Nuevas canciones, pronunciadas por especialistas en la obra machadiana.
María del Pilar Celma Valero, profesora de Literatura de la Universidad de Valladolid, desgranó el poemario y rebatió los prejuicios que, históricamente, ha habido sobre su cuestionable calidad poética y su supuesta falta de unidad, siempre ensombrecido como ha estado por Soledades y Campos de Castilla. En opinión de la profesora Celma, Nuevas canciones tiene la misma unidad que los dos anteriores, supone una «valiosa aportación» en la trayectoria poética de Machado, así como una «evolución muy coherente y una profundización en líneas solo apuntadas en Campos de Castilla«, y posee una calidad poética indudable.
Javier Blasco Pascual, también profesor de la Universidad de Valladolid, presentó un estudio estilométrico de la obra machadiana. Blasco dijo que Nuevas canciones define a Machado como un poeta «de ayer y antes de ayer, de hoy y de mañana», porque su poesía «es de una extraordinaria actualidad». Según el estudio del profesor, si Campos de Castilla contiene 12.396 palabras reales, Nuevas canciones posee 7.883. A su juicio, no se puede ser «más sencillo, más conciso y conseguir con menos elementos mayor sinceridad y palpitación del espíritu» que Machado en algunas composiciones de este poemario de cuya publicación se cumplen ahora cien años. «Roca», «verso», «mar», «chopo», «sierra», «contigo», «luna» o «río» son algunas de las palabras que más repite el poeta en Nuevas canciones, donde también se advierte una reducción del uso del «yo».
Juan Antonio del Barrio Álvarez, académico de San Quirce y coordinador de la jornada, protagonizó la tercera ponencia, que giró en torno al poema «En tren. Flor de verbasco», la composición que Machado dedicó en Nuevas canciones a los jóvenes poetas vanguardistas que le rindieron homenaje en el Pinarillo de Segovia el 18 de mayo de 1923. Del Barrio desgranó el poema, ahondó en los pormenores que rodearon aquel homenaje, profusamente contado en los periódicos de la época, y desveló la intrahistoria de un momento que Machado vivió con intensidad, cordialidad y agradecimiento. En 2023, la Academia de San Quirce evocó el almuerzo de Machado con los jóvenes poetas en el mismo paraje donde tuvo lugar cien años atrás.
José Manuel Lucía Megías, poeta y profesor de la Universidad Complutense de Madrid, cerró las ponencias con una acabada pieza literaria titulada Leer ‘Nuevas canciones’ cien años después: la poesía más allá de la razón poética.
Un animado coloquio entre los ponentes y el público asistente, muy numeroso, cerró la sesión matinal de la jornada conmemorativa, en la que también se presentó la edición facsímil de Nuevas canciones.